Acciones para una recuperación sostenible del turismo

Declaración de Tiflis

Declaración de Tiflis

Nosotros, los ministros y representantes de las administraciones nacionales de turismo de los Miembros del Consejo Ejecutivo de la Organización Mundial del Turismo (OMT), reunidos con ocasión de la 112.ª reunión del Consejo Ejecutivo de la OMT en Tiflis (Georgia) del 15 al 17 de septiembre de 2020,

Recordando:

La resolución 70/1 de la Asamblea General de las Naciones Unidas del 25 de septiembre de 2015 sobre “Transformar nuestro mundo: la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible”,

El Código Ético Mundial de la OMT para el Turismo, adoptado en virtud de la resolución A/RES/406(XIII) en la decimotercera Asamblea General de la OMT de 1999 y reconocido por la Asamblea General de las Naciones Unidas en 2001, y su conjunto de principios, como referencia para la adopción de medidas responsables en aras de la recuperación del turismo,

Las recomendaciones de la OMT “Apoyo al empleo y a la economía a través de los viajes y el turismo. Llamamiento a la acción para mitigar el impacto socioeconómico de la COVID-19 y acelerar la recuperación”, un conjunto de recomendaciones que piden un apoyo firme y urgente para ayudar al sector turístico mundial a recuperarse del reto sin precedentes de la COVID-19,

Las Prioridades de la OMT para la recuperación del turismo  y las Directrices globales de la OMT para reiniciar el turismo,  preparadas por el Comité Mundial de Crisis para el Turismo con objeto de guiar la respuesta del sector turístico a la crisis de la COVID-19 y sentar las bases de la resiliencia futura y del desarrollo sostenible,

La visión de One Planet para una recuperación responsable del sector turístico, que ofrece orientación sobre las líneas maestras para una recuperación turística responsable al servicio de las personas, del planeta y de la prosperidad,

El Informe de políticas de las Naciones Unidas “COVID-19 y la transformación del turismo”,  presentado por el Secretario General de las Naciones Unidas sobre el impacto de la pandemia de COVID-19 en el turismo, que ofrece recomendaciones a los responsables públicos para que las medidas de recuperación socioeconómica integren respuestas decisivas e innovadoras para el amplio y complejo ecosistema turístico,

Las recomendaciones de la OMT que instan a una “Respuesta inclusiva para los grupos vulnerables” en la recuperación del turismo de la COVID-19, con especial atención a las mujeres, los jóvenes, los pueblos indígenas y las personas con discapacidad,

Junto con esta red de infraestructura, es esencial también facilitar la posibilidad de que los turistas tengan alojamientos apropiados y económicamente accesibles en términos reales.

Observando que:

El turismo es uno de los sectores económicos más duramente golpeados por la pandemia de COVID-19, ya que afronta un declive en el número de llegadas de turistas internacionales durante 2020 de entre el 58% y el 78%, con una cifra de empleo directo del turismo en riesgo de entre 100 y 120 millones;

La crisis de la COVID-19 ha demostrado la necesidad de reforzar la resiliencia y la inclusividad del sector turístico a través de la unidad y la cooperación entre agentes turísticos a escala nacional (regional y local) e internacional;

Convenimos en que:

La crisis es una oportunidad para repensar cómo interactúa el turismo con nuestras sociedades, con otros sectores económicos y con nuestros recursos naturales y culturales y nuestros ecosistemas, con el fin de medirlo y gestionarlo mejor, garantizando una distribución justa de sus beneficios, e impulsar la transición hacia una economía turística neutra en carbono, más resiliente e inclusiva;

Y reafirmamos nuestro compromiso de trabajar en aras de la recuperación sostenible del turismo:

Para que todo aquello que ofrece el turismo pueda materializarse de la forma más efectiva posible, son necesarios los esfuerzos conjuntos y la coordinación del sector empresarial, el sector privado, la sociedad civil y todas las instancias competentes del sector público, incluida la internacional. Deberían establecerse los mecanismos apropiados para que los turistas reciban toda la atención que requieren en el destino, convirtiéndose así los viajes en un espacio y un tiempo de felicidad.

Para ello se requiere coordinación ministerial y administrativa, y la participación de todas las administraciones públicas a quienes compete hacer posible que un país se convierta en un destino turístico y garantizar que los turistas perciban la máxima satisfacción en sus viajes, empezando por la entidad responsable del turismo y pasando por aquellas responsables del transporte y las infraestructuras, el alojamiento, la atención sanitaria, la seguridad jurídica, el orden público y la salud.

Todos estos ministerios, departamentos y organismos deberían coordinarse mediante las correspondientes comisiones, bajo la supervisión directa de un funcionario que forme parte de la estructura de gobernanza de cada administración. El resultado de esa coordinación debería garantizar que todas las medidas promuevan también el reconocimiento y la aceptación social del turismo como una contribución a cada país.

Este sistema de coordinación debería extenderse a las organizaciones nacionales, al sistema de las Naciones Unidas, y a otras organizaciones internacionales.

La coordinación y la colaboración entre países respecto a sistemas de intercambio, modelos de éxito y experiencias resulta esencial.

  1. Por las personas:
    • Manteniendo el empleo, especialmente de las mujeres, los jóvenes y los trabajadores por cuenta propia, así como los trabajadores de la economía informal, y apoyando a las empresas, incluidas las microempresas y las pymes,
    • Mejorando la coordinación y la cooperación internacionales en cuanto a los procedimientos de viaje para promover unos viajes seguros, fluidos y no discriminatorios,
    • Promoviendo un enfoque gubernamental integral mediante el refuerzo de la coordinación y la cooperación verticales entre el turismo y otros sectores, entre ellos salud, transporte, interior, relaciones exteriores, comercio, cultura y otros servicios,
    • Fortaleciendo las alianzas público-privadas y los mecanismos que involucran a las comunidades en su conjunto en aras de la recuperación,
    • Protegiendo la salud y los derechos fundamentales de los trabajadores en el sector turístico, garantizando que se observen unos criterios de trabajo decente y se garantice la igualdad de oportunidades en la recuperación para todos,
    • Creando confianza entre los viajeros, los trabajadores y las comunidades receptoras mediante el suministro de información transparente y objetiva, así como la aplicación de protocolos adecuados de salud, higiene y seguridad, prestando especial atención a promover la inclusión de todos los viajeros,
    • Promoviendo la educación y el desarrollo de capacidades para incrementar la agilidad y el valor del capital humano;
  2. Por el planeta:
    • Transformando el sector turístico para que haga un uso más eficiente de los recursos y sea neutro en carbono, en sintonía con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) y el ODS 12 en particular,
    • Supervisando y comunicando las emisiones de CO2 de las actividades turísticas y acelerando su descarbonización,
    • Aprovechando las tecnologías digitales para contribuir a la planificación, la gestión y la supervisión de los aspectos medioambientales del turismo, así como de las repercusiones de los nuevos protocolos de seguridad,
    • Apoyando la biodiversidad y la conservación, promoviendo el turismo nacional y regional, así como el turismo rural, gastronómico, de montaña, de naturaleza, de patrimonio, de aventura, marítimo/costero y cultural como experiencias que crean valor añadido para las comunidades locales, protegen el medio ambiente y generan beneficios locales,
    • Invirtiendo en soluciones basadas en la naturaleza para un turismo y unas infraestructuras sostenibles, que incluyan la eficiencia energética, el transporte y la gestión de residuos, de modo que las prácticas turísticas sean más sostenibles; y
  3. Por la prosperidad:
    • Situando el turismo, como comercio de servicios, entre las prioridades de los planes de recuperación socioeconómica por su capacidad de crear empleo y transformar la sociedad, con un fuerte efecto multiplicador en otros sectores a lo largo de sus extensas cadenas de valor,
    • Creando un entorno estimulante para el emprendimiento y la transformación tecnológica, haciendo especial hincapié en las microempresas y pymes, así como en los trabajadores por cuenta propia y los de la economía informal, con el fin de mantener los puestos de trabajo existentes y apoyar la creación de nuevas oportunidades de empleo,
    • Invirtiendo en el desarrollo de nuevas capacidades, entre otras cosas en formación en capacidades digitales, para los profesionales actuales y futuros del turismo,
    • Maximizando el uso de las tecnologías en las actividades turísticas y mejorando la competencia digital,
    • Facilitando la inversión para las empresas turísticas y la infraestructura pública, con el objetivo de diversificar mercados y productos y reducir la estacionalidad y la dependencia de un estrecho conjunto de factores externos, especialmente en el marco de la transición ecológica,
    • Fomentando el desarrollo de un turismo rural sostenible y responsable como medio de creación de empleo, inclusión social y desarrollo regional, haciendo especial hincapié en el turismo interno y en los mercados emisores cercanos,
    • Acelerando la transición hacia una economía circular en la cadena de valor del turismo,
    • Midiendo más allá de los impactos económicos y generando datos regulares y puntuales para apoyar la toma de decisiones con miras a la sostenibilidad del turismo, y desarrollando y armonizando datos, indicadores y sistemas de inteligencia, entre ellos los macrodatos (big data) y la inteligencia artificial, para medir y gestionar mejor el turismo,

Creemos en la capacidad excepcional del turismo de servir de apoyo para la recuperación de las sociedades ante el reto sin precedentes de la pandemia de COVID-19 y contribuir a la Agenda 2030.

Estos impactos sin precedentes exigen soluciones innovadoras en cuanto a estructura financiera, así como solidaridad y colaboración a todos los niveles. Será necesario renovar el compromiso del sistema multilateral y las agencias de desarrollo en general para apoyar los esfuerzos gubernamentales.

Los planes y las políticas de reapertura y recuperación, para ser efectivos, deberían anteponer a las personas, haciendo que las distintas alianzas y la coordinación permitan que el turismo se reinicie de manera segura, acelere la recuperación económica y lleve esperanza a millones de personas.

Expresamos también nuestro sincero aprecio y agradecimiento al Gobierno de Georgia por su gentil invitación a albergar una reunión presencial del Consejo Ejecutivo de la OMT en el contexto de la pandemia, permitiéndonos disfrutar de su rico patrimonio cultural y su hospitalidad extraordinaria.

Apoyamos los esfuerzos de Georgia y las medidas políticas efectivas implantadas para reactivar los sectores de la hostelería y el turismo y reabrir gradualmente las fronteras, posicionando a Georgia como un destino turístico resiliente, sostenible y altamente valorado en el mapa turístico mundial.

Tiflis, 16 de septiembre de 2020