Conexión entre los productos y servicios turísticos locales y el Hotel Marina Copán, cerca de Ruinas Copán, Honduras

Conexión entre los productos y servicios turísticos locales y el Hotel Marina Copán, cerca de Ruinas Copán, Honduras

El proyecto ST-EP sobre «conexión entre los productos y servicios turísticos locales y el hotel Marina Copán, cerca de Copán Ruinas», en Honduras, acaba de llegar a su fin, tras dieciocho meses de trabajo, gracias a la alianza tripartida entre la OMT, el SNV y la Fundación ST-EP.

Copán es una antigua ciudad maya que ha dado nombre al actual municipio de Copán Ruinas, inscrito en la lista del Patrimonio Mundial de la Humanidad de la UNESCO en 1980. En 2006, Copán Ruinas recibió unos 150.000 turistas. Sin embargo, las estadísticas indicaron que, en esta época, sólo el 5% de la población fue empleada en el sector turístico.

El objetivo del proyecto fue el desarrollo sostenible de la cadena de abastecimiento turístico al establecer una relación entre el hotel Marina Copán, así como otros establecimientos turísticos de Copán Ruinas, y varias microempresas. Entre otras cosas, se evaluaron las prácticas de sostenibilidad turística del hotel Marina Copán para establecer una lista de los productos y servicios que podían suministrar las microempresas locales. Varios cursos fueron impartidos para mejorar la calidad de los productos y reforzar la capacidad de los profesionales de 15 empresas seleccionadas para participar al proyecto. Estas actividades tuvieron como resultado la creación de una cooperativa, “Copán Progresa”, que gestionó los créditos y el capital inicial del proyecto. A continuación, se elaboraron productos publicitarios para cada una de las microempresas especializadas en excursiones o en arte y gastronomía, jardinería, joyería, escultura y cerámica.

El proyecto se inscribe precisamente en las buenas prácticas recomendadas por la OMT para la reducción de la pobreza, entre las que figura la de que los bienes y servicios sean suministrados por grupos desfavorecidos, o por empresas que empleen a personas desfavorecidas, con el fin de evitar fugas económicas y aportar así mayores ingresos al circuito económico local. El proyecto benefició a 300 personas. El personal empleado, en las empresas seleccionadas por el proyecto, se multiplicó por dos, entre 2008 y 2011, y los beneficios se incrementaron en este mismo periodo.  

El proyecto se ha desarrollado en colaboración con el programa de las Naciones Unidas sobre «creatividad e identidad cultural para el desarrollo local» y se ha editado una guía para mejorar la participación de microempresas de creación y cultura en las ferias y exposiciones locales.